SEGUNDO DÍA DE VIAJE: RECORRIENDO LA COSTA ISRAELÍ

Nos han levantado a las 06h30, ya que la salida la teníamos prevista a las 08h00, y había que desayunar y recoger maletas.

Después del desayuno nos hemos subido al bus y, con la lluvia como compañera de viaje, nos hemos puesto en marcha. En el bus nuestro guía ha puesto a prueba nuestros conocimientos bíblicos, premiando los aciertos en las respuestas con artículos de recuerdo de esta tierra. También nos han repartido unos receptores con un auricular, para seguir las explicaciones del guía, que lleva una emisora. ¡Así da gusto visitar cosas! No necesitamos ir pegados al guía y podemos ir un poco a nuestro aire para hacer fotos.

Nos hemos dirigido hacia Caesarea Marítima, primera visita del día, para ver el Teatro Romano y los vestigios de las sucesivas civilizaciones que se asentaron una tras otra en la ciudad; hemos visto una película muy interesante en la que se recreaba la ciudad en sus diferentes etapas; Herodes, el Imperio Romano, Bizancio, la época árabe, los cruzados, la posterior destrucción total por parte de los árabes... Fue un puerto muy importante en una época esplendorosa para el comercio. Completamente destruida, sus ruinas se convirtieron en canteras de mármol.

De Caesarea hemos pasado por Haifa, otro gran puerto en el Mediterráneo, y hemos disfrutado de las vistas de los Jardines Bahá'i. 

Y a continuación nos hemos ido a Monte Carmelo ("Monte Carmel"), al Santuario carmelita de "Stella Maris". Marcelo nos ha explicado que los nombres que acaban en "el" hacen referencia a Dios: Carmel ("el jardín/viñedo de Dios"), Rafael ("la curación de Dios"), Miguel ("¿quien cómo Dios"), etc. Aquí hemos celebrado la Misa, con varias referencias en lecturas y oraciones a la Virgen del Carmen.

Después hemos coincidido con varios grupos en la visita de la Iglesia principal del Monasterio, donde hemos visto varias referencias a dos grandes carmelitas, Santa Teresa de Jesús y San Juan de la Cruz, y hemos visitado la gruta de Elías.

De camino al hotel Palm Beach (en San Juan de Acre), donde hemos comido, Marcelo nos ha explicado el significado de la comida Kosher ("Permitida", o que respeta los preceptos de la religión judía); así nos hemos enterado, entre otras cosas, que los mamíferos pueden ser consumidos si cumplen dos requisitos: que sean rumiantes, y que sean de pezuña partida (¡adiós al cerdo!); en cuanto al pescado, nos ha contado que debe tener esqueleto y escamas (¡adiós al marisco!); y que no se pueden mezclar en una comida carne y lácteos, porque ya indica la Biblia que "no cocinarás al cabrito en la leche de su madre" (¡adiós al sándwich mixto y a los librillos de lomo!).

La comida, genial. Un buffet con un montón de ensaladas, arroces, pollo, pescado, dulces... ¡Todo exquisito! Ya veremos qué opina la báscula a la vuelta...

Nada más comer hemos hecho una visita a un comercio con su propio taller de artículos de cobre grabado, al lado de la entrada a la Ciudadela de los Cruzados, que hemos visitado a continuación. ¡Espectacular! Y, como en muchos otros lugares del mundo, con parte de la Ciudadela sin acabar de restaurar por falta de fondos para la restauración. Hemos visto cosas interesantísimas aquí.

Luego nos han llevado a ver el Túnel de los Templarios: un túnel que la Orden del Temple construyó para poder tener una vía de escape en caso de necesidad, y que se descubrió por accidente, cuando una señora que vivía encima del túnel (sin saberlo) solicitó a un fontanero que le revisara la instalación porque las cañerías se le habían atascado... ¡Qué cosas pasan!

Y de aquí a Tiberíades, al hotel Restal (podéis verlo en http://www.restal.co.il/Site/en/pages/homePage.asp) a coger las habitaciones, a cenar prontito y a descansar, que mañana será probablemente el día más duro del viaje. También os lo contaremos aquí.

¿Os han gustado las fotos? Podéis escribir vuestros comentarios.